Hoy mi reflexión no tiene nada que ver con mi profesión. Hoy quiero reflexionar sobre el mundo, los sentimientos, la sociedad.
Llevo días en un estado de reflexión constante, debido a los últimos acontecimientos. Y no me refiero sólo a París. Me refiero también al Líbano que ha sufrido un atentado en estos días del que no habla casi nadie. Me refiero a esos países en guerra desde hace años... esos países de los que no se habla tanto en los medios de comunicación ni en las redes sociales.
Hay tantas cosas que ignoramos pues no nos toca directamente...
He escuchado multitud de opiniones estos días, muchas de ellas versaban en torno a lo que los gobiernos deberían hacer, o lo que en Siria se debería hacer; siempre lo que OTROS deberían hacer...
Pero no escucho reflexiones en torno a lo que YO podría hacer. Porque nos libera de responsabilidades el pensar que la solución no está en mi mano. Pero sí lo está.
Está en mi mano vivir la vida intentando fomentar el amor y no el odio. Está en mi mano demostrarlo día a día: en mi casa, con las personas que tengo cercanas, resolviendo los conflictos y no fomentándolos.
Está en mi mano permanecer. Acompañar a la gente en su camino y hacer a la vez el mío teniendo en cuenta los valores que me gustaría ver en la sociedad. Porque la sociedad empieza en un@ mism@.
Si yo no vivo lo que exijo, ¿Qué estoy haciendo? Castillos en el aire.
Permanecer, si. Porque hoy en día las cosas son efímeras, y hasta las personas...
Hay que permanecer al lado de las personas, transmitiendo con tu vida lo que predicas con tu boca.
Así es como el otro cambia. Cuando ve que hay alguien que le acompaña de verdad, que estará ahí para darle animo pero también para ponerle limites, para decirle cuándo se equivoca, o simplemente para estar, en silencio pero estar. PERMANECER.
Dejemos de exigirle al OTRO, al gobierno... al mundo, que cambie. Y cambiemos nosotros. Pues cuando se vive el amor, la alegría, la esperanza día a día, en tu vida. Eso se transmite, se contagia y cada vez mas personas vivirán en esa clave.